En tan solo 50 minutos, Chaplin consigue mediante imágenes y música, adentrarnos en una hermosa, dura y cómica historia sobre una relación entre un chico y un adulto que por cosas del destino forjan una relación Padre-Hijo y vemos como dia a dia se las ingenian para vivir. Aunque es una historia durilla, chaplin consigue endulzarla con su toque.
Una auténtica maravilla.